El “Palming” es una técnica de relajación para los ojos, que implica detener las funciones que realizan los ojos, desde los músculos que se encargan de la acomodación y de la convergencia, hasta la retina y sus células receptoras, logrando relajar el sistema visual por un corto período de tiempo.
Esta técnica la puede realizar cualquier persona, pero es especialmente útil para aquellos que pasan muchas horas frente a la pantalla de una computadora, o que tienen trabajos que le exigen mucho a los ojos. Esta exigencia constante produce agotamiento visual, ojos irritados, rojos y cansados, picazón, hasta temblor de párpado.
¿En qué consiste la técnica de Palming? Muy sencillo: lo ideal es estar en un lugar tranquilo y silencioso, ayudará a relajarse más, pero no es imprescindible. Siéntate enfrente de una mesa y apoya los codos en ella, frótate las manos, cierra los ojos y apoya las manos sobre ellos de manera ahuecada, asegurándote de que no entre nada de luz.
Con la mente relajada, hay que observar la oscuridad de los párpados atentamente, concentrarse en ella mientras se respira profundamente, sin pensar en otra cosa. Se puede hacer durante el tiempo que se quiera, pero lo ideal es entre 5 a 15 minutos.
La técnica de Palming ayuda a relajar la tensión ocular producida por la exposición a la computadora, y se puede combinar con otros ejercicios y técnicas, como parpadear los ojos muchas veces seguidas, o guiñar un ojo y luego el otro, apretar los parpados, etc.
Si te interesa saber más sobre cómo evitar el síndrome visual informático, lee esta nota.